¿Buscando el Nuevo Paradigma? Conoce la Inteligencia Colectiva
El viernes 18 de marzo de 2016 una amiga me invitó a una conferencia que se iba a dar en nuestra ciudad, ella ya conocía por YouTube al conferencista, yo nunca lo había oído hablar y no reparé mucho en su nombre sino en el contenido de su charla. Me gustó tanto lo que expresaba dentro de la descripción del evento de Facebook que me entraron unas ganas locas por ir; en los últimos años había perdido esa emoción por conectarme con otras personas y hacer un esfuerzo extra para poder ir a un sitio lleno de gente, ya que siempre conseguía un mundo cada vez más distante al mío y prefería filosofar sola y me explotaba la cabeza de tanta información que siento se debe transmitir y que se tiene que distribuir, que está estancada en un embalse inmenso llamado “viejo paradigma”.
Inteligencia Colectiva
La entrada era a contribución consciente y no disponía ni un centavo extra del presupuesto familiar mensual, como era mediodía y la charla era en la tarde-noche se me vino a la mente de inmediato algo que vengo trabajando y que ya lo he escrito por acá sobre el intercambio, que nada es gratis, que tenemos que idearnos con lo que suma y no pararnos por lo que rija la única moneda de cambio del viejo paradigma; me llené de valentía, porque la programación es aún fuerte y le dije a mi amiga que aún no sabía si iba, que iba a pensar qué podría dar de intercambio ya que no tenía dinero, porque me vibró el contenido de manera tal que valía la pena reprogramar ciertas cadenas. Se me ocurrió escribir una carta y en esta explicar que no tenía dinero y que les ofrecía difusión y el intercambio era una serie de artículos sobre la conferencia, la página web y la película que está pronta a estrenarse.
Este es el artículo sobre la conferencia.
Khalil Baskary se paró frente a todos nosotros y con voz muy segura empezó a hablarnos de cómo había emprendido su viaje “a ver si podía encontrar a más personas que sentían como él”, esa frase me atrapó de inmediato y el resto de su charla la sentí como quien escucha a un hermano. Nos habló de cómo desde niño veía un dibujo y un patrón repetidas veces, que no podía sacar de su mente y esa fue la clave para su búsqueda, ya que sentía que no era casual esa “obsesión” como él mismo la llamó y al indagar en miles de libros, páginas, dibujos, autores descubrió que era un toroide y ese fue el primer peldaño hacia la aventura de descubrir su propósito en el planeta, profundizar en su significado y aplicación para luego difundirlo creando su empresa: “CosmoSociología”, cuyo logo es otro dibujo que lo obsesionaba desde siempre.
Nos llevó a un viaje dentro del paradigma que ya conocemos, sólo que lo hizo desde el costado que no solemos ver y es el desnudar las creencias que tenemos, que al ser cotidianas no vemos su forma, sólo el poder que nos irradia y con eso ya estamos dispuestos a seguirlas. Nos narró muy minuciosamente y con una pasión indescriptible cada uno de sus descubrimientos sobre estas creencias y en las que él sentía incoherencias aunque el grueso de la población de la tierra las seguía como un dogma de fe.
[bctt tweet=»Nos llevó a un viaje dentro del paradigma que ya conocemos, lo hizo desde el costado que no solemos ver»]
Nos contó sobre el cerebro y como siempre hemos creído que luego de la muerte cerebral ya no hay vida y que todas nuestras acciones siempre van supeditadas al mismo, cuando recientes hallazgos dicen lo contrario; nos trajo un sinfín de ejemplos con nombres comprobables sobre casos de readaptación de medio cerebro para un funcionamiento completo de la persona desafiando toda creencia que cada parte del cerebro está destinada para algo en específico y si se ve dañada esa funcionalidad se ve truncada para siempre y por otro lado, de cómo irradiamos magnetismo del mismo. También habló de la importancia del corazón sobre el cerebro y nuestra toma de decisiones y de cómo el toroide magnético que emana es mucho mayor que el del cerebro. Para explicar esta parte reparó en cada detalle para que no quedara duda en ninguna de las personas en la audiencia de todo lo que explicaba para poder pasar al siguiente paso, además que la emoción de compartir toda esta información lo embargaba a tal punto de sensibilizarnos a todos, haciendo una conferencia elocuente y muy animada. Pude entender que para que todos estuviéramos en la misma página, él tuvo que profundizar mucho en esta parte, ya que cada vez iba adentrándose más en las viejas creencias a puntos vibratorios y de energía; razón por la cual de las dos horas y media que estuvo prevista la duración de la charla este punto se llevó más de la mitad y sólo eran los puntos 1 y 2, de los 12 que estaban programados.
Al final se pudo hacer dos actividades prácticas de las muchas que estaban programadas dónde una consistía en ver a la entrada de la conferencia cuántas tapitas había dentro de un frasco y cada persona de la audiencia al entrar debía adivinar su número y este valor era anotado con el nombre de la persona al lado. Al final se dió el resultado y el número más bajo rondaba los cientos, el más alto por 1300 y el número real de tapitas era de 425. A la hora de sumar todos y sacar el promedio de todos los intentos, el resultado dió 426, mostrando que nuestro aporte solo tal vez no se acerque a la realidad y que igual no esta errado, solo tiene que juntarse con otros aportes y entre todos construir una realidad llamada: INTELIGENCIA COLECTIVA. Por mi naturaleza indagadora y porque todo en mi vida pasa de esta manera, pude tener acceso al papel donde estaban anotados los valores y busqué mi nombre y las personas que estaban delante y detrás de mí y que recordaba sus valores y vi como al lado de cada valor estaba la suma con el producto del número anterior y no hubo truco en esta cuenta.
[bctt tweet=»Solos no nos acercamos a la realidad, al juntarnos construímos: INTELIGENCIA COLECTIVA.»]
Una segunda actividad nos demostraba el magnetismo que irradiamos cada persona y cómo afectamos a otros con la misma; este ejercicio lo realizó con la asistencia de su compañero Hernán.
Personalmente, opino que este tipo de conferencias lleva sólo una espina dorsal y que los nervios, músculos y piel la va haciendo la audiencia, ya que hablamos de un nuevo paradigma el cual se viene dando desde la cocreación, si el interlocutor viene a darnos la misma pastilla que le da a cada cual que lo invita a compartir la información estaría cayendo en el viejo paradigma de cumplir con un canon y no compartirse por completo según las necesidades de cada audiencia.
Luego de un refrigerio de 15 minutos pasamos a la siguiente hora, que era muy poco para exponer los 10 puntos restantes, los cuales eran igual de interesantes que los primeros 2 y merecían ser explicados de la misma manera, cosa que no ocurrió por estar supeditados al tiempo externo del alquiler de un sitio físico, lo que nos hace reflexionar en que los recintos del viejo paradigma y sus formas de cómo ve el espacio tiempo ya va siendo insuficientes para los encuentros de este nuevo paradigma, los cuales son tan flexibles como lo dicte la dinámica sin carecer de propósito claro; ya no es una necesidad de masificar información, es una danza de consciencia y entendimiento, internalización de la información para su posterior ejecución. Ya no basta con dar la información, es necesario el acompañamiento y el respetar las particularidades de cada protagonista; razón por la cual la educación está cambiando en esta generación y no sólo abarca a niños, nos arropa a todos con su dulce cambio.
Me encantaría volver a compartir con este grupo de personas en un encuentro de fin de semana, con sus días y sus noches, al aire libre y alrededor de una fogata, donde haya acompañamiento con debate, dónde haya ideas y el conocer más sobre la perspectiva interesantísima de Khalil y poder deconstruirla y reconstruirla en consenso, así nos llevara 12 horas un solo punto.
Si quieres que CosmoSociología vaya a tu ciudad los puedes contactar y conocer más sobre estas muy interesantes teorías que ellos nos traen para reflexionar, tomar lo que nos resuena, crear con ella nuevos acercamientos y desechar lo que no. Así como lo hizo el grupo La Plata Consciente para realizar este hermoso evento. ¡Gracias chicos!